Las piscinas son sin duda uno de los lugares preferidos a la hora de combatir el calor en verano, pero no hay que olvidarse de que es necesario seguir una serie de consejos en cuanto a la seguridad de sus elementos de forma que evitemos accidentes peligrosos como pueden ser los resbalones indeseados, especialmente en el caso de los niños.
Uno de los factores clave para evitar accidentes es el uso de los bordes para piscina. Estos abarcan todo el perímetro de la piscina y además de servir como decoración tienen un importante papel en cuanto a la seguridad. Las losetas utilizadas para su instalación deben de ser antideslizantes de forma que al pasear por el borde de la piscina evitemos un resbalón que podría provocarnos un golpe en la cabeza o en cualquier otra parte del cuerpo a caer sobre los mismos. De igual forma se recomienda que estas lleven algún sistema de iluminación para que se vean por la noche.
El uso de bandas antideslizantes es la opción más común para salvaguardar aquellas zonas que suelen ser más resbaladizas y por tanto más peligrosas. Este es el caso de los trampolines, uno de los lugares mas frecuentados al ser un elemento de diversión sobretodo en el caso de los niños. Otro de los lugares que más resbalones provocan son los escalones de las escaleras de entrada y de salida de la piscina. Al estar sumergidos en el agua dan lugar a que el pie se escurra por no tener ningún elemento que lo sujete a los peldaños. La utilización de bandas antideslizantes de goma sirve para asegurar que el pie quede fijo a la hora de subir o de bajar y de esta forma evitaremos sufrir un accidente.
Dentro de las numerosas ventajas que ofrecen las bandas antideslizantes destaca su precio, el cual suele ser bastante económico y la amplia variedad de colores y de grosor que podemos encontrar en el mercado. Pero sin duda la mayor ventaja está en la seguridad que aportan, pudiendo confiar en que no se producirá un resbalón que pueda derivar en un peligroso accidente.
Foto: Kourasanit