Villas suntuosas, castillos inmensos en el campo, casas con vistas infinitas…, estas son las casas elegidas por las celebridades más famosas, oasis de placer en los que pueden escapar en busca de privacidad.
Residencias de este tipo, distintas en estilo, originalidad y dimensiones, van siempre acompañadas de un elemento indispensable si se quiere relajar en serio: la piscina. De Los Ángeles a Malibú e Italia, en todas estas residencias la piscina se integra y magnifica la belleza de la casa y del ambiente que lo rodea.
La casa de Britney Spears en Malibú es una de tantas residencias de famosos en la que la piscina es un elemento central de la arquitectura. La piscina está rodeada de casi una hectárea de terreno, con una casa de seis habitaciones, nueve baños, dos cocinas, una sala de proyecciones y dos habitaciones de matrimonio, por un valor cercano a los 13 millones de dólares. La piscina es un biolago que rodea buena parte del perímetro de la casa. Se trata de la recreación de un lago, con grandes cantos rodados que la delimitan y una pasarela de madera para acceder al agua. La grandísima piscina tiene en su interior una isla rodeada de vegetación, en cuya colina hay una sugerente cueva con una bañera de hidromasaje. El acceso a este ambiente está oculto por una cascada de agua con un chorro continuo.
Piscina di Britney Spears Fuente: x17online
Otra piscina sugerente es la de la cantante barbadense Rihanna, en una de las zonas más chics de Los Ángeles. La piscina es un elemento arquitectónico que une las dos alas de la casa, compuesta de siete habitaciones, 9 baños, una cocina de alta tecnología y un jardín de 2000 m2. La piscina tiene una bañera circular de hidromasaje dispuesta en un patio que conecta con otra bañera rectangular. Esta piscina cuenta con muchas fuentes de chorro filiforme a lo largo de su perímetro que durante la noche crean un bellísimo efecto.
Piscina de Rihanna Fuente: Milioliform
Otra piscina escenográfica es aquella de Beverly House que ocuparon los Kennedy. La villa tiene casi 6500 m2 y consta de 29 habitaciones, 40 baños, biblioteca, sala de billar y cine privado. La protagonista de esta casa es la piscina, con cuevas, cascadas, fuentes y estatuas que recuerdan las antiguas villas de los patricios románicos. La parte final de esta piscina la constituye una terraza de 25 metros, rodeada de arcos románicos inmersos en la vegetación del entorno. Un placer valorado en 70 millones de dólares.
Piscina Beverly House Fuente: Myluxury