Las tareas de mantenimiento y mejora que solemos llevar a cabo en nuestra piscina son varias y diversas, pero la gran mayoría están destinadas a preservar el estado de las instalaciones o realizar reparaciones. En algunas ocasiones, simplemente queremos darle un toque diferente a la piscina, eliminar la pintura del fondo y colocar gresite, por ejemplo. Ya sea para realizar algún arreglo o para cambiar su apariencia, la eliminación de la pintura es una tarea compleja que exige minuciosidad y muchas dosis de paciencia.
Por ello, si podemos, lo primera que tenemos que hacer es buscar información sobre el tipo de pintura que tiene la piscina. Aunque el proceso para retirar la pintura es similar en todos los casos, no todos los pigmentos son iguales. Saberlo nos puede ayudar a elegir el método más adecuado.
De modo general, uno de los modos más usados para eliminar la pintura es mediante la acción conjunta de un decapante y cepillo metálico. Para emplear un decapante especial seguiremos las instrucciones del producto y lo dejaremos actuar el tiempo que indique. Después, tendremos que raspar a conciencia con un cepillo de púas metálicas para hacer desaparecer el pigmento. Si tenemos una radial o un taladro, podemos instalar el cepillo en la herramienta y aplicarlo sobre la superficie que presente restos de pintura. De este modo, el trabajo no nos resultará tan duro y tedioso.
Si tenemos una hidrolimpiadora podemos hacer uso de ella y aplicarla directamente sobre la superficie a tratar. Con esto conseguiremos ablandar la pintura. Una vez hecho, emplearemos un solvente, mejor si es cítrico, y dejaremos actuar según las instrucciones del producto. Otra opción para ablandar la puntura es el cloruro de metileno, que también nos ayudará a que esta se desprenda de las paredes y del fondo. Por último, volveremos a hacer uso de la hidrolimpiadora para que los restos de pigmentos se despeguen definitivamente.
Otro método más efectivo es aplicar chorros de arena a presión sobre el fondo de la piscina. En este caso lo normal es que pidamos ayuda a profesionales del sector, que cuentan con el material necesario para ello. Sin embargo, algunas empresas ofrecen el alquiler de la máquina necesaria, o incluso de una hidrolimpiadora, que cuenta con unos accesorios que permite también emplearla para que echar chorros de arena a presión. De este modo, podremos realizar el trabajo nosotros mismos.
Algunos expertos aconsejan, para ablandar la pintura, el empleo de ácido muríatico, agua fuerte o salfumán. Debido a la peligrosidad del producto, recomiendan usar protección adecuada. Tras la aplicación del ácido, también tendremos que raspar los restos con un cepillo metálico.
Recuerda pedir ayuda a un profesional. Las empresas especializadas en pinturas y limpiezas de piscinas te ofrecerán un trabajo limpio y profesional sin que tengas que hacer esfuerzo o buscar productos y maquinaria especial. No dudes en informarte cuál es el mejor método para eliminar la pintura de tu piscina. Estos profesionales te asesorarán también sobre la opción más conveniente una vez que se hayan retirado los restos de pigmentos del fondo (gresite…) y cómo realizar un mantenimiento correcto del mismo.