Ya sea por falta de espacio o por cuestiones económicas, lo cierto es que una piscina hinchable es una excelente alternativa a las piscinas de obra, una manera mucho más barata de poder disfrutar de un refrescante baño durante los meses estivales sin necesidad de invertir mucho dinero y ni tiempo en la realización de la piscina.
Pero si uno de los mayores problemas de las piscinas de obra son las grietas y filtraciones por las que la piscina pierde agua, el principal inconveniente de las piscinas hinchables es que esta se pinche. Ambas contrariedades tienen solución, si bien en el caso de las piscinas hinchables la reparación es mucho más fácil y sencilla.
La mayoría de las piscinas cuentan con un kit de reparación que está compuesto por plantillas autoadhesivas realizadas en el mismo material que la piscina y que presentan el mismo diseño o dibujo. Si este no es tu caso o ya lo has empleado en otra ocasión debes saber que en las tiendas especializadas también los venden. Además del kit de reparación tendremos que buscar un rotulador negro y tener cerca las instrucciones de nuestra piscina.
El rotulador nos servirá para marcar la zona del pinchazo. Lo rodearemos para que sepamos dónde tendremos que colocar el parche de reparación.
Siguiendo los datos del fabricante vaciaremos, o no, la piscina. En principio, los parches se pueden colocar sobre el pinchazo con la piscina llena de agua, pero hay algunas marcas que recomiendan su vaciado para una correcta reparación. Por ello es importante que sigamos al pie de la letra las normas indicadas por el fabricante. Eso sí, si nos aconsejan vaciar la piscina antes de llevar a cabo la reparación, tendremos que esperar a que el plástico esté completamente seco.
Acto seguido, debemos buscar el pinchazo para colocar sobre él el parche de reparación. Al señalarlo antes de vaciarla, nos resultará muy fácil. Con unas tijeras recortaremos la pieza de plástico que encontraremos en el kit y la colocaremos sobre el pinchazo. Sobre ella colocaremos el parche.
Como hemos comentado, también podemos adquirir estos kits de reparación en tiendas especializadas. Normalmente encontraremos parches de látex y un pegamento especial para reparar la rotura. En estos casos, lo recomendable es vaciar la piscina y limpiar con alcohol la zona antes de aplicar el pegamento y colocar el parche, y dejar secar durante uno o dos días antes de llenar de nuevo nuestra piscina.